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«Para él soy una inversión»: joven deja que su novio pague todas las cuentas y ella no da un centavo

 

A cambio le ofrece todo su amor.

Durante prácticamente toda la historia de la humanidad, los roles de género estaban bien definidos y eran imposibles de romper.



Las mujeres se encargaban de la casa y los hijos mientras que los hombres debían salir a trabajar para conseguir dinero.

Poco a poco, las mujeres comenzaron a luchar para que esto cambiara y tanto ellas como los hombres, gozaran de los mismos derechos y oportunidades.

Aunque aún falta mucho camino por recorrer, las mujeres ahora también son proveedoras del hogar y los hombres pueden encargarse de las labores domésticas.

Por otro lado, esto también ha llegado a generar debates sobre quién debería pagar qué en una relación amorosa entre hombre y mujer.

Muchos consideran que lo ideal es que fuera equitativo, de acuerdo a las posibilidades de cada persona pero hay quienes creen que el hombre aún debería encargarse de todo lo económico.

Hannah Chan es una chica de 27 años que hace que su novio pague absolutamente todo, pues ella se ve a sí misma como una «inversión».

Aunque Hannah es capaz de ganar su propio dinero y pagar sus cuentas; lo que desea es que alguien más la mantenga.

A cambio ella le ofrece apoyo y cariño, que es lo mismo o incluso más que el dinero.

Al menos eso es lo que ella considera y tiene muy claras sus expectativas.

En el 2021, un joven de 22 años llamado Ed Reay decidió invitar a salir a Hannah sin imaginar lo que vendría a continuación.

Ellos se conocieron en línea durante el mes de mayo y en julio finalmente se vieron en persona.




 Al parecer hicieron «click» y para septiembre del mismo año ya vivían juntos.

Decidieron mudarse a Londres y tener una vida de ensueño.

Desde el principio Hannah fue contundente con Ed y le exigió que pagara todo.

El joven aceptó los términos y condiciones y desde que la relación se formalizó, él se encarga de todos los gastos del hogar y hasta los gastos personales de Hannah.

La mujer sentenció que no pondría un solo centavo porque no quería ser «dominante» al tener más poder económico en la relación; al contrario, quería que alguien la dominara.

Hanna es consultora de negocios y es bastante exitosa en Londres y de acuerdo con ella, es gracias a su trabajo que se dio cuenta de la clase de relación que quería.

«Yo no quería ser la persona dominante y quería a alguien que me diera todo.

Ed aceptó esas condiciones desde el primer momento.

Él se encarga al cien por ciento de lo financiero y yo le doy el cien por ciento de apoyo y amor. 

Trato de ayudarlo a que se relaje cuando tiene días estresantes en el trabajo», declaró la mujer.

«Al principio, él solo pagaba en las citas, pero después fue pagando cosas como el cuidado de mis uñas y ahora también es la renta y las cuentas de la casa.

Mi valor es el apoyo que yo doy como balance en la relación.



El dinero no es todo lo que vale. Yo, por ejemplo, traigo el mismo valor a la relación con todo lo que hago por él.

No hay bueno y malo cuando dos personas están de acuerdo en lo que quieren. 

Esto funciona para nosotros y eso es lo más importante» agregó.

Por el momento, esta dinámica funciona de maravilla para ambos y están contentos y conformes con el tipo de relación que tienen.

Por supuesto, Hannah y Ed no son la única pareja que tiene el mismo estilo de vida o uno similar al de ellos; y mientras se sientan cómodos está bien.

Sin embargo, el detalle con Hannah es que las declaraciones que ha hecho son bastante incómodas pues pareciera que se ve a sí misma como un objeto más que una persona.

Y por otro lado, también podemos llegar a pensar que vende sus caricias pues ofrece amor y apoyo a cambio de que alguien la mantenga por completo.

Pero quienes somos nosotros para juzgar.

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